El narrador omnisciente.

0
1666

Dios

MEX41. CIUDAD DE MÉXICO (MÉXICO), 25/05/2012.- El escritor colombiano Fernando Vallejo participa hoy, viernes 25 de mayo de 2012, en una charla con alumnos de la escuela mexicana de escritores, en Ciudad de México. Vallejo adelantó hoy que trabaja en una obra aún sin género definido sobre la "terrible realidad" que enfrenta el ser humano, ricos y pobres, ante la vida y la muerte, y que ha titulado "El desastre". EFE/Sáshenka Gutiérrez MÉXICO LITERATURA

Decir que destruir es mas fácil que crear es un lugar común. El proceso de creación requiere de cierto atrevimiento, de la dosis de irreverencia que implica ser inmune a la crítica y de la nobleza de carácter de admirar en otro el talento sin caer en el pecado capital de la envidia hasta el punto de querer apropiarse de su obra como Ricardo Azolar al asesinar a Daniel Valencia en la obra de Eduardo Liendo “Los platos del diablo”. No existen recetas de cómo escribir: Mario Vargas Llosa termina su obra “Cartas a un joven novelista” conminando al lector de no dar tanta vuelta ni buscarse tantas excusas para hacerlo. Si el deseo es genuino basta con actuar. Horacio Quiroga, aconseja resistir en lo posible a  imitar un estilo pues entiende el proceso de forjarse un estilo propio como una búsqueda incesante. Milan Kundera, en el arte de la novela; pone la historia como un marco referencial en la novela e invita a descubrir espacios vitales nunca antes vistos, además  de juzgar a Don Quijote de la Mancha, magna obra de las letras hispanas de Miguel de Cervantes y Saavedra como el precursor de la novela moderna. Fernando Vallejo critica abiertamente la óptica del escritor que juega a ser Dios metiéndose en la mente de un personaje pretendiendo adivinar o establecer lo que va a decir o a hacer o ser un  tercero. Solemos leer a los que ya han tenido éxito en ese oficio; éxito en premios de reconocimiento internacional, en cantidad de libros vendidos, en lágrimas sacadas del público target que el marketing editorial ya definió, que alude a la necesidad imperiosa de muchos de reflejarse en lo que lee,de aferrarse a cada página, oración, palabra y letra como una tabla que flota precariamente en el mar de su inconsciente agazapado en su realidad. En no pocas ocasiones; el primero de los nombrados agradeció infinitamente a su esposa por aislarlo de la cotidianidad para permitir que escribir sea su trabajo de oficina, Horacio Quiroga se sobrepuso a sus tragedias personales y hacer catarsis escribiendo historias cortas que atrapaban el interés de muchos adolescentes de los años 80 en Venezuela interesados en sus cuentos hasta el punto que de disputarse con el basket, el beisbol, el licor y el manual no escrito de como seducir mujeres la preferencia entre los temas de conversación en las esquinas de un caserío de la geografía de una isla ubicada en el sur del Caribe. Milan Kundera sobrevivió al silencio impuesto por la cortina de hierro para refugiarse en Francia y el francés como nueva lengua para estructurar sus historias hasta convertirse en un referente mundial de la creación literaria. El último; el ilustre colombiano (Premio Rómulo Gallegos como el flamante novio casi octogenario de la madre de Enrique Iglesias) permanente iconoclasta religioso, opuesto a todo; se ha hecho protagonista de su propia obra en cada uno de sus experimentos narrativos (Cuando no hace de biógrafo de poetas de su país de nacimiento) que tal vez no estén llenos de imágenes alucinantes y de metáforas originales mas si impregnados  manera de sus opiniones políticamente incorrectas acerca de lo humano y lo divino con una prosa incesante y metódica con la que renuncia irrevocablemente a la responsabilidad de ser ese narrador omnisciente asumiendo con valentía las consecuencias que deben tener en sus relaciones familiares destrozar los mitos creados alrededor de instituciones culturales universales como la madre, la patria, la religión y  la ciencia; pagándolo con exilio y amenazas de muerte de esos muñecos sin cabeza que su obra ha ido dejando. Crear es un ejercicio de libertad, ejercer la libertad trae consigo la censura e la intolerancia con las que se debe vivir liberándose de esos pesados fardos que son la familia, la sociedad y la conciencia.

Dejar respuesta

Please enter your comment!
Please enter your name here