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No Country For Old Men

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Luego de que películas como The Ladykillers e Intolerable Cruelty (1) fueran malinterpretadas por el público y la crítica. Los Coen nos entregan un film superior no solo a sus recientes películas, sino a otras como Fargo, The Man Who Wans´t Theree incluso creo que a Barkton Fink, película que siempre he creído que es la mejor de los hermanos Coen. No Country For Old Men, es una cinta enorme, aunque a algunos les parecerá más de lo mismo y a otros un soberano fastidio.

La premisa es sencilla, Llewelyn Moss (Josh Brolin) encuentra en el desierto un maletín lleno de dólares dentro de una camioneta donde yace, junto a varios cadáveres, un “sediento” moribundo, en lo que evidentemente es una fallida operación de tráfico de drogas. Luego de que la conciencia le remuerda por dejar al sediento hombre muriendo solo en el desierto Moss decide volver al lugar donde halló el botín y al hacerlo se convierte en el objetivo de Antón Chigurh (Javier Bardem), un despiadado hombre que mata a personas con una especie de arma que funciona con una bomba de oxígeno. En paralelo, el Sheriff del pueblo Bell (Tommy Lee Jones) también andan tras Moss.

Pero esto es solo la epidermis, ya que si bien la doble persecución (triple, si consideramos a Woody Harrelson, pero su personaje no tiene relevancia) mueve al film No Country For Old Men es una película, cine cine cine de verdad verdad, nada es gratuito y quizás esa sea una de las críticas que se le puedan hacer a la cinta, todo luce demasiado calculado.

En primer lugar se puede afirmar que No Es País Para Débiles es una cinta sobre el choque de dos generaciones, la que representa el Sheriff Bell, un hombre de principios y discursos épicos al que se le vienen las convicciones encima al contemplar la desesperada cacería de Chigurh sobre Moss, un señor viejo y débil para el cual ya no hay lugar en la Norteamérica violenta y sanguinaria de hoy. En segundo lugar es una cinta sobre la suerte, así, el asesino Chigurh jugará con una moneda ante desconocidos para hacerles saber que su muerte depende del azar “estar vivos es una casualidad” dice Alberto Berrera Tyszka en La Enfermedad, y en este film Chigurh lleva esto como una convicción personal, porque Chigurh no es que sea un hombre sin convicciones y sin principios, al contrario tiene sus valores, lo mismos valores de la Norteamérica de hoy, valores como el fin justifica los medios, las personas solo estorban cuando el fin es el dinero; al menos, creo que cuando Antón habla y se molesta solo por tener que repetir las cosas dos veces siento que hay un mensaje subjetivo: la sociedad de hoy, esa en la que las convicciones de los viejos y débiles no tienen lugar, no gusta de comunicarse, no negocia nada, solo ordena y si las órdenes son desacatadas pues hay que proceder como Chigurh lo hace, asesinando a sangre fría y sin que ello genere algún remordimiento, porque después de todo el matar a sangre fría ya no es un acto moralmente condenable, ese hecho entra perfectamente dentro de la ética personal de Chigurh, es por eso que Bell se halla intranquilo y descolocado en el mundo de hoy, esa metáfora es grandiosa. En tercera instancia podemos decir que la persecución de Chigurh no es solo la búsqueda del dinero, sino el enfrentamiento obsesivo de un hombre contra otro que no es su opuesto sino su símil, después de todo, si Chigurh tiene una ética que lo lleva a matar sin compasión y a ver las personas como objetos, Moss no es muy distinto, al igual que Antón, Moss, tiene un gusto por terminar las cosas a su debido momento, es igual de meticuloso y si decide quedarse con la maleta de real y huir por conservarla es porque siente, igual que su persecutor, que puede hacerlo, así que si puede, ¿por qué no? Si en el proceso debe alejar a su esposa hasta ponerla en riesgo o debe pagar a unos adolescentes para que le den ropa (tal como lo hace Chigurh al final de la cinta) pues lo hará. Esa es también su ética personal, Bell no solo no comprende a Chigurh por su sanguinarismo, tampoco entiende a Moss por su empeño en conservar y proteger el dinero.

Y ese es el tema de la cinta, aunque a simple vista parezca un… ¿Western? ¿Policial? ¿Comedia Negra? Un poco de todo, los Coen le rehuyen a cualquier género y su cinta es calculada, lenta, detallista, bebe de todo un poco, pero al final todo queda como un cóctel, claro es un cóctel hecho por dos bartenders que tienden a hacer de sus películas obras inclasificables.

A Javier Bardem le han caído innumerables y merecidos elogios, amén del oscar que se ganó ayer (2), por su performance como el monstruoso asesino Antón Chigurh, Tommy Lee Jones igual, pero la película la pertenece a Josh Brolin, su actuación es lo mejor del film, es imposible no sentir empatía por esta actuación, a pesar de que sabemos que Moss no es el héroe de la cinta.

En fin, les advierto que soy fanático del cine de los Coen, así que a lo mejor se me va la mano hablando bien de ellos. Ustedes dirán cuales son los defectos del film, pero yo no le encontré mayor cosa…

10/10

John Manuel Silva.

(1) Creo que Intolerable Cruelty es un film subvalorado, a mi me pareció una genial comedia que se burlaba en la cara de George Clooney, Catherine Zeta Jones y Billy Bob Thorton por sus publicitados romances, acuerdos prenupciales y solterías empeñadas; lo mejor es que la cinta parece una simple comedia romántica, pero en realidad es un film brillante, solo que muchos no lo notaron en el primer visionado.

(2) Por cierto, que ladilla, los oscars estuvieron aburridísimos.

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