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Sobre precios justos y la guerra económica en Venezuela.

Pensando como prosumidora*, una serie de planteamientos me vinieron -cual bombardeo- a la cabeza -y porqué no, también al pecho-.

Esto disparado luego de una reunión de productores orgánicos.

 

Se debatía ¿Qué es un precio justo?

 

Al decidir comprar un producto u otro, estás apoyando a un ente (productor) o a otro.

En Pérez Bonalde y otros lugares -puntuales- de la ciudad de Caracas, se consiguen, por ejemplo «andinos(1)» o camiones que venden una serie generalizada de de rubros en un promedio de 70 Bs. (Unos a 60, otros a 70 y otros a 80, a groso modo) Ahora bien.

 

Arar, abonar, germinar, cosechar, transportar y distribuir un kilo de alimento NO cuesta eso, es decir; NO se está pagando toda la cadena de producción ¿Qué se está pagando? A mi se me ocurre el siguiente panorama:

 

1) Lavado de dinero

2) Importación desde Colombia.

3) ¿Por qué no las dos?

Sin mencionar que Venezuela no está produciendo semillas a la escala necesaria, es decir, la gran mayoría de las semillas utilizadas en la agricultura a gran escala son importadas; factor que no sólo encarece la cadena, sino que hace a los productores dependientes de más agrotóxicos, dado que las especies mejor adaptadas a las condiciones climáticas, plagas y demás condiciones, son, sin duda, las especies nacionales.

Ahora bien, otro punto que atenta contra la producción son los precios regulados:

Un ejemplo fácil es el café: En Venezuela sí se produce el café necesario para cubrir la demanda(1), no obstante, el precio regulado es sumamente bajo, es decir: 1 Quintal (46kg, aprox) de café verde al productor (Lavado superior) a bolívares 5.040,00, dando un total de (109,565 cada kilogramo), sí, un precio ilusorio a todas luces. Si yo al comprar el producto final: Procesado, empaquetado, distribuido pago 60 bolívares el medio kilo, es evidentemente muy subsidiado. Colombia paga mejor este rubro, a pesar de que allí se produce, lo mismo ocurre con el cacao: se está exportando una gran parte del cacao extrafino. Otro caso: El arroz: Tiene un precio de venta al público de bolívares 25 el kilogramo y 7 bolívares al productor, igualmente el maíz.

 

¿Cuesta eso producirlo? ¿Cuentan los campesinos y productores con la seguridad social adecuada? Siendo ellos, promedialmente muchísimo peor pagados que los trabajadores de la ciudad, teniendo en cuenta un consumo de calorías altísimo, riesgos con fauna y condiciones climáticas. ¿Cuesta su tiempo de arado, siembra, abonado, cosechado y secado ese precio?

Al tomate autóctono(3) se le llama: Tomate cagón o mierdero.

¿Racismo? ¿Quién dijo?

¿No es el subsidio y control de precios una manera de perpetuar la cultura rentista y economía de puerto?

¿No es un modo de violencia atroz marginar y condicionar de esa manera a los trabajadores de la tierra?

Otra consecuencia de este sistema es la elitización de los productos orgánicos o bio a una clase que pueda pagarlos, siendo estos, muchas veces más baratos en producción pero más caros en el producto final.

Resumiendo, estos son los factores que considero yo, atentan contra la producción nacional y sistema de precios:

1) Importación de semillas y dependencia de agrotóxicos y pesticidas.

2)Infinidad de intermediarios. Si los comerciantes de Coche compran en Valencia, ¿Por qué Coche es una suerte de mercado de valores en cuanto a alimentos se refiere?

3)Subsidios.

4)Políticas sociales de marginación del campesinado a través de implementación de «precios justos» (¿Justos para quién?).

Es totalmente inviable un sistema de precios justos por parte del Estado, teniendo en cuenta que son modos de tener «papa barata» para perpetuarse en el poder teniendo a las masas pagando precios ilusorios. Cualquiera con dos dedos de frente es capaz de reconocer que este tipo de políticas son perecederas y violentas en cada una de sus aristas.

 

 

Citando al poeta Miguel James:

 

Si una puta de «El Doral»

Cobra 2.500 bolívares por un coito

Y a mi me paga la editorial

2.000 bolívares por un libro

Escrito durante 15 años

Yo creo que a mí

Alguien me está haciendo trampas.

 

Esto no está escrito en piedra: Sólo estoy buscando alternativas prácticas y responsables para adecuar mis propios hábitos de producción-consumo a una realidad sumamete violenta.

 

 

Tajadas con Telita.


*Productora y consumidora simultáneamente.

 

(1)Dado que a quienes vemos NO son productores, me cuesta fiarme de lo que responden como procedencia del mismo.

 

(2) Con sus pros y contras: El café arábica es una especie de SOMBRA, para cubrir la demanda, se basa en monocultivos de amplio espectro, lo que hace que se haga a pleno sol, con una cantidad de agrotóxicos bastante elevado.

 

(3) Por ser una raza local, no se ve afectada por la plaga, se adapta a las condiciones climáticas venezonalanas, pero a la hora de comercializarlo es el más complicado, porque es pequeño y el consumidor promedio prefiere un producto grande lleno de pesticidas que un producto de semilla local y autóctona más pequeño(Así se comercialicen ambos por peso).

 

A propósito:
De bolas que estamos jodidxs si se paga mejor al bachaquerx que al/la productorx.

 
Update: 29/09/16
En los lugares más simpáticos, se consiguen las verduras en promedio Bs. 600.
Los productos básicos y subsidiados son inexistentes en anaqueles.
El aceite de oliva está muy caro :'(
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