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Maduro Aprieta y (no) gana

TresChifladosEl madurismo apela a que el pueblo es bruto por encima de farandulero. Más allá de la indignación de los otrora «oprimidos» que hoy apoyan al oficialismo, y se indignan por la ofensa racial  y el razonamiento burgués de adjetivar a sus líderes de malandros,  tendrán que callarse la bocota al ser testigos –y partícipes obligados, claro- de la colosal payasada de situar en las candidaturas del municipio Sucre y Baruta a El Potro Álvarez y Winston Vallenilla respectivamente. Podría hacer el ejercicio creativo de adivinar cuál de las figuras de logística del nuevo Estado apostó por el beisbolista-pégale a tu mujer-perreo intenso de El Potro y el (cómo olvidarlo) Winston Traje de dos colores Vallenilla, y no vislumbro a ningún personaje lo suficientemente atrofiado –es que ni el ñángara de Villegas, vale- como para cederle tamaña responsabilidad a dos oportunistas de rigor que, más temprano que tarde, se pintarán de colores y ninguno será rojo.

Inclino mis apuestas a que la orden vino de la isla. La misma donde pasó sus últimos días el finado que encarnó en un pajarito llamado nostalgia, donde se puso la soga al cuello el palangrista comunicacional de las noches oficialistas y la misma a la que cada alto funcionario de este país pasa reporte de los escenarios actuales para ser asesorado sobre cómo actuar en los escenarios futuros.

¿Escenario futuro? Diciembre

Baruta y el municipio Sucre son para el madurismo aquello que los gringos (sí, los gringos que qué arrechera les tienen) llaman petty cash. Sabido es que figuras como Layla Sucar; Roberto Messutti; Roque Valero; Susej Vera y los aquí mentados El Potro y Winston, son meros culitos del oficialismo o el combo necesario para adornar sus mítines: los culos, el cantante y los papiaos chupa esteroides que hablan de Izquierda y Revolución.

Sin ánimo contestatario, dudo que algún venezolano apueste por la sapiencia y conocimiento político y gerencial del Potro y Winston. Ni siquiera incluí en este artículo la candidatura a la alcaldía de Maracaibo de Pérez Pirela porque, al menos, cierta formación académica y política tiene –dice su CV cibernético que hasta en La Sorbona; no consigo link en la red que me lo confirme-  y lleva varios años payaseando en su Cayendo y corriendo.

Si hay algo que tiene este pueblo es la condición de farandulero. Habrá que esperar hasta diciembre para comprobar si es cierta también la tesis del madurismo de aquí somos brutos por y sobre todas las cosas.

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