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“Decidí volver a Venezuela para desarrollar un proyecto de granja autosustentable/ecoescuela”

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LA UTOPÍA POSIBLE

 

Wilhelm Trujillo, biólogo de la U.S.B., es un venezolano-alemán que no se intimida cuando la gente lo llama Güilmer en lugar de su nombre, el cual en Alemania se pronuncia tan fácil como decir Guillermo. Luego de vivir varios años en Barcelona, Wilhelm decidió volver a Venezuela para poder compartir con su familia y poner en marcha un proyecto de agricultura sustentable. Probablemente muchos lectores juzgarán su decisión, considerando que “como están las cosas”  y teniendo pasaporte europeo, ¡!. Sin embargo, Wilhelm está consciente de la fertilidad de nuestras tierras y la necesidad de divulgar el conocimiento de la permacultura en nuestra región. Un terreno en La Sabana, estado Vargas, será el lugar donde se realizarán cultivos orgánicos, construcciones ecológicas y un espacio educativo donde personas de todas las edades puedan experimentar otro tipo de realidad diferente a la vida citadina.

 

→  Cuéntanos Wilhelm ¿Cuál fue tu primera experiencia en sustentabilidad?

→ Mi primera experiencia fue en España donde participé en un curso de 20 días cerca de Castellón aprendiendo a construir una casa utilizando la técnica del superadobe. Ese curso me cambió la vida. Los demás participantes nos conectamos tanto y estábamos tan motivados que casi terminamos toda la casa ¡aunque nadie se lo esperaba!. En las tardes, luego del trabajo, nos reuníamos para cantar, echar chistes y comer sentados alrededor de una fogata. La vibra que se sentía era maravillosa … nada de egos, nada de conversaciones banales, nada de competencia. Allí comprendí que otro mundo sí es posible.

Luego de esa experiencia supe que quería vivir en una casa ecológica y compartir con gente que estuviera en la misma onda. Me vine a Venezuela donde pude hacer el Curso de Diseño en Permacultura con la gente de la Ecoescuela El Manzano de Chile. Fue algo estupendo y desde ese momento no he parado.

 

→ ¿Con qué causa te sientes comprometido?

Quisiera pensar que la única causa es ayudar a que nos entendamos como una pequeña pieza de un gran rompecabezas. Todo lo que pensamos, decimos y hacemos en este plano físico tiene repercusiones. Somos hijos de la Madre Naturaleza y no sus dueños.

 

→ Por otra parte, en Venezuela hay mucha inseguridad sobre el futuro y eso afecta a las personas. ¿Cómo explicarle a alguien que tiene que hacer cola durante 3 horas para comprar algo que debe preocuparse por la ecología?

 Justamente esa necesidad, esa escasez, esa problemática ¡potencia la búsqueda de otros modelos!. No puede existir luz sin oscuridad y viceversa. Toda la problemática en Venezuela está generando la necesidad de los individuos de ayudarse unos a otros y emprender otros modelos socioeconómicos. Yo pienso y creo fervientemente que justamente en las crisis más fuertes es cuando se hacen los cambios más profundos. Los humanos somos muy reacios a los cambios, si fuera por nosotros nos quedaríamos anclados en el modelo anterior simplemente por comodidad. Necesitamos de una crisis grave para vernos en la necesidad de cambiar.

 

                        

(Aguacates y Pomarosas en almibar (papelón) cosechadas por Wilhelm y su gente. A la venta, wtrujillop@gmail.com,  0424-2430994 y 0412-7305140)

 

 

→  Como biólogo ¿Cuál es tu relación con la academia?

 Mi relación terminó cuando me di cuenta que como biólogo académico era parte de un sistema muy rígido que sólo busca perpetuarse en el tiempo. Yo me he sentido biólogo mucho antes de siquiera empezar la carrera, desde niño tenía una conexión muy profunda con la naturaleza y ahora que soy un hombre medianamente libre siento que puedo ayudar al mundo mucho más que si fuese un empleado en algún instituto, universidad o ministerio. Las instituciones solo encasillan y coartan a los profesionales y la burocracia los hace lentos y dependientes. La biología que estudié en la universidad debería llamarse necrología pues todo lo que hacíamos era examinar cadáveres y organismos muertos y disecados. La biología que estudio ahora la observo vivita y coleando a mi alrededor.

 

¿Cuál consideras que es nuestro principal problema a nivel global?

Afrontar la destrucción de nuestro hábitat natural a escala global. Los gobiernos no hacen ni harán nada para impedir que esto suceda así que nos toca a los pocos individuos medianamente conscientes unirnos y hacer lo mejor que podamos.

 

Este tipo de movimientos busca generar nuevos modelos de sociedades, como las comunidades, donde los miembros tienen una relación muy estrecha entre si. ¿Qué ocurre cuando los egos atacan?

Me alegra que preguntes por la lucha de egos y como funcionan estos nuevos procesos comunales porque eso es algo sumamente importante. La permacultura necesita de un nuevo modelo basado en la cooperación, en la inclusión, y para eso es necesario que las personas hagamos primero los cambios internos necesarios para poder convivir unos con otros exitosamente. No todo el mundo está preparado. Lo bueno es que personas con un nivel de consciencia similar tienden a agruparse por resonancia; por eso estos movimientos están creciendo a una velocidad vertiginosa y eso potencia que otras personas logren llegar a esos niveles de conciencia. Si es cierto que debe haber un guía o varios guías, que son aquellas personas con más experiencia y que tienen la capacidad de gerenciar y delegar; pero un verdadero líder jamás se impone, jamás decreta absolutamente, jamás se apropia de un proyecto. Queremos que todos los involucrados tengan voz y estén de acuerdo con las decisiones finales.

 

– ¿Qué otras personas tienen proyectos parecidos y cómo podemos contactarte?

– Aquí en Venezuela trabajo con varios amigos:

Rodolfo «Fyto» Sandoval que tiene un terreno en las afueras de San Cristobal y lleva un proyecto llamado Cooperativa Bambusa. Él es una de las personas más activas con la permacultura a nivel nacional y contínuamente está impartiendo talleres y charlas por todo el país a precios muy solidarios.

También esta otro pana que se hace llamar Mishi Moshi quién tiene un movimiento que se llama Arepacore.

Otro gran exponente del movimiento en Venezuela es Orlando Enrique Rivero quién tiene un Centro de Tecnologías Apropiadas llamado Amaranto en Alto de Santa Fe en el Estado Sucre, él también dicta muchísimos talleres de muy alto nivel.

Todos ellos se pueden contactar por Facebook. Hay un grupo en Facebook que se llama Permacultura en Venezuela donde regularmente se postea todo tipo de información y eventos. Mi contacto en Facebook es Wilhelm Trujillo, mi correo wtrujillop@gmail.com y mis teléfonos 0424-2430994 y 0412-7305140. ¡Gracias por la entrevista y buenas tardes!.

 

 

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