panfletonegro

No hay nada más triste que un artista feliz

tristecome

Siendo la música una de mis grandes pasiones, siempre he mantenido una premisa; un real artista debe «sufrir» emocionalmente, para que materialice sus vivencias en grandes obras producto de una real intensidad que reflejen su vida y pensamientos. Hace unos meses leí un artículo de Rufi Guerrero, llamado ‘La delgada línea entre el periodismo y la amistad‘ y en sus partes finales encontré este extracto que me encanto:

«Un artista no se crece en las alabanzas, se crece en las situaciones adversas. Las mejores canciones nacen de despechos y las mejores obras de gente perturbada. No hay nada más triste que un artista feliz. Un artista en situación de confort se estanca, no produce nada nuevo y su creatividad se desvanece. Es lo que le pasa a cualquier persona a la cual nunca se le señalo sus defectos».

De ahí, vi esa grandiosa frase digna de enmarcar, «No hay nada más triste que un artista feliz». Y realmente así lo es. Si hacen una pequeña retrospectiva, las mejores obras musicales se han realizado en los momentos de mas intensidad, tristeza, confusiones, y porque no decirlo, cuando mas roncha ha pasado el artista, o sin ir tan lejos, en los momentos mas intensos de su vida, es cuando mejor le fluye su trabajo. Las veces que he escuchado a un artista decir, «este álbum lo compuse en un momento muy feliz de mi vida», o «me encuentro en un momento muy feliz a diferencia del pasado», tengan la certeza de que el álbum en cuestión, será o es, una grandísima merengada de mierda.

Obviamente, existen excepciones a la regla, de grandes álbumes hechos en etapas felices y tranquilas del artista, como el caso de «Wasting Light» el séptimo álbum de estudio de Foo Fighters (2011), siendo uno de los mejores discos del rock en los últimos 20 años. Pero para muestra de un botón, citare algunos ejemplos de estos cambios «prefabricados» de estados emotivos que hasta el día de hoy, a dichas obras, les siguen lloviendo las criticas negativas.

El genio compositor Billy Corgan ya una vez disuelto The Smashing Pumpkins, tuvo una pasantía de felicidad en su vida, y creo un adefesio cargado de letras «color esperanza» llamado Zewn (2003), «Me estoy divirtiendo. No me he divertido durante años… Así fue como, «Tal vez debería tener una banda donde pueda divertirse«. Pues, aún causa espasmos en los estómagos de sus seguidores las veces que se escucha decir la palabra «Zewm».

Cuando James Blunt debuto con su gran álbum ‘Back to Bedlam’ (2004) cargado de líricas con profundos y melancólicos temas; luego de ese tremendo éxito, al 3er álbum, el británico decidió ser «feliz» y en una mezcla de arcoiris, gente sonriendo con mucha melaza entre los dientes surge, ‘Some Kind of Trouble’(2010) donde declara: «este nuevo proyecto establece un cambio de estilo musical en mi carrera, debido a que mis canciones dejan de lado la melancolía expresada en mis dos anteriores álbumes y toman un carácter más optimista». «De hecho, el primer single, ‘Stay The Night‘, es un entusiasta de sentirse bien himno, lleno de sol». Señores sí quiero escuchar un álbum donde un carajo celebre en cada tema y nos restriega que su vida es de pinga, coloco un CD de Pitbull porque se que él realmente lo esta viviendo. Todo músico tiene el derecho a reinventarse pero decir, ¿este lo haré con alegría?

¿Saben ese sentimiento que surge, cuando alguien se avergüenza tanto así mismo, que se llega a sentir incómodo? Eso mismo debió sentir Chris Cornell luego de producir ‘Scream’ (2009), un álbum netamente de música electrónica, con arreglos pop, música disco y R&B; 100% alejado de guitarras y rock. Para esa aberración, busco al rapero y productor de R&B y hip hop, Timbaland quien ahogo una de las mejores voces del rock, con trucos de estudio y temas falto de alma. Salvándose de ese álbum, solo el  soul ‘Two Drink Minimum’, sencillo que solo se haría famoso años después, una vez que Cornell lo adapto a su real estilo, al de su desgarradora voz con guitarra en mano.

Axl Rose recientemente en su ultima entrevista realizada en las Vegas, se le pregunto ¿cual ha sido su momento más feliz en la vida? respondiendo, «en la actualidad es cuando soy realmente feliz«, pero viendo sus actuales conciertos donde se le ve actuando bajo perfil, sin el gran performance y la egolatría que lo caracterizo como un Dios de los escenarios, dista de creer que ahora sea mas feliz que su época de gloria. Con esta nueva gente me siento por primera vez en familia  -Al referirse a los cambios de formación original de la banda en 1992-. El álbum ‘Chinese Democracy’ (2008) fue la peor manera de regresar después de tanto tiempo, dista muy, pero muy lejos, de las épocas de gloria de Guns.

No olvidemos cuando Alanis Morissette a partir de ‘Under Rug Swept’ (2002) decidió dejar de ser la voz protestante de las mujeres, atrás quedaron sus profundos temas y letras que representaban todas las realidades de la mujer contemporánea; para con ese álbum dedicarse a interpretar temas pop y «alegres» pero faltos de calidad y esencia. Algo similar sucedió con Jewel con su criticado disco ‘0304’ (2003), en especial el decepcionante vídeo del sencillo Intuition‘ . Simplemente dejaron de hacer buena música buscando algo más «fresco» pero alejado de sus reales estilos e identidades. Quizás Shakira fue la única gran artista que, se multiplico en fama y fortuna luego de cambiar radicalmente, de aquellos grandes álbumes como  «Pies Descalzos» o «¿Dónde están los ladrones?» a un estilo netamente banal y a una imagen netamente sexy, para pasar a letras vacías e incomprensibles al oído -siendo éstas en español- y claro está, a nivel de composición, todo un bodrio pero que se vende a millones como pan caliente.

Repito, Todo músico tiene el derecho a reinventarse pero decir, ¿éste álbum lo haré con alegría? Dejaron de hacer buena música buscando algo más «fresco», algo más popular, más comercial, pero alejado de sus reales estilos e identidades. Conclusión: «No hay nada más triste que un artista feliz«. 

Salir de la versión móvil