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¿Fobia a los homosexuales? Por Alfonso Carril.

Este escrito nació a propósito de varios otros artículos que han publicado recientemente acerca de la “Homofobia” y de mis comentarios dejados en uno de ellos, por lo que decidí, tomar mis comentarios y hacer con ellos mi propio artículo acerca de lo que pienso.

En el tema de la “Homofobia” al igual que en el de la “Xenofobia” y otros tipos de fobias hacia personas y parte de sus características específicas, más que temor, lo que reside en el individuo movido o afectado por este tipo de fobias, es el odio, odio hacia el homosexual o hacia la homosexualidad, odio hacia el extranjero, sobre todo cuando forma o pretende formar parte de su sociedad, aunque es interesante hacer notar que mientras en el caso de la Xenofobia lo que pareciera afectar al individuo con ese síndrome o patología, es el odio puro y real hacia los extranjeros, sin embargo, en el caso de la homofobia, el odio pareciera tener otros matices “ocultos” en los afectados, y esto es, más que odio real y puro hacia los homosexuales, en muchos casos comprobados, se ha determinado que existen o pudieran existir resentimientos y sentimientos muy encontrados y contradictorios en las personas que manifiestan este tipo de “rechazo” público hacia las personas que son atraídas sexual y sentimentalmente por otras personas de su mismo género; esto es, que quienes son o manifiestan sentimientos homofóbicos, podrían estar protegiendo su verdadera inclinación o deseos reprimidos, que vendrían siendo iguales, parecidos o más ocultos y censurables que los propios gustos homosexuales, por lo que, estaríamos hablando de que quienes manifiestan rechazo a los homosexuales probablemente tienen también gustos homosexuales, pero tratan de luchar contra ese sentimiento rechazando y señalando a quienes lo muestran abiertamente, y estamos hablando de que en el mejor de los casos, los homofóbicos también podrían ser homosexuales que no se aceptan y no conciben su homosexualidad o bisexualidad y por ello toman la homofobia como su bandera de autodefensa; pero por otra parte, podría ser una forma de desviar la atención sobre sus gustos sexuales perturbadores, que podrían ser no de tipo homosexuales sino de tipo zoofílicos, necrofílicos o pedofílicos, por ejemplo, es decir, los homofóbicos en realidad lo que buscan es desviar la atención sobre sus propios y verdaderos deseos sexuales hacia un tipo de relaciones sexuales tan o más censurados que la misma homosexualidad.
Este tema de la homosexualidad, de la homofobia y de todo lo que tenga que ver con las resistencias y las intolerancias de todo tipo, es harto interesante, ya que no solo los homosexuales sufren de la intolerancia por sus preferencias sexuales, sino que los mismos homosexuales pueden tener algún tipo de intolerancia hacia otro grupo de personas o características en ellas que igual hace de los homosexuales personas intolerantes, pero, es importante ver una cosa, y es que la tolerancia es una sentimiento y una capacidad para adaptarnos a circunstancias de la vida, es decir, de cero a cien todos tenemos porcentajes de tolerancia distintos a distintas circunstancias de la vida, por lo que, todos manejamos rechazo o aceptación a algo en un porcentaje de adaptación, lo que es peligroso o realmente álgido es el caso de la intolerancia cero o nada de tolerancia o la tolerancia cien o todo de tolerancia, porque es allí cuando podemos ser o demasiado restrictivos o demasiado permisivos, y como ya es bien sabido lo mejor o lo más conveniente es lo que mantiene la balanza equilibrada.
También por otra parte, está esto del “arrastre” que trae la historia y los convencionalismos, por lo que, lo que está escrito de una forma hace miles de años es lo que se sigue teniendo como “correcto” y es muy pero muy poco flexible a revisiones y nuevas visiones de las nuevas generaciones, y es por ello que la educación pasa casi inmutable de generación en generación, con ello, todo el aprendizaje y los buenos conceptos, pero también se mantienen arraigados los errores y mentiras que no somos capaces de enmendar y desmentir.
A propósito del tema de la homosexualidad también escribí algo al respecto, pero tomándola de un personaje como lo es el Sr. Boris Izaguirre, acá pueden echarle un vistazo: http://li.co.ve/fyF

Muchos de quienes son homofóbicos saben hoy en día que se ha descubierto que la homofobia es un método para desviar la atención hacia los otros y para que no vean en él o no indaguen en él lo referente a sus gustos o preferencias sexuales, las cuales, naturalmente revelará públicamente que son heterosexuales obviamente! Lo que sí es aceptado por todas las sociedades a nivel global, pues está arraigado de esa forma en el convencionalismo por siglos y siglos de historia.
Interesante que hoy en día el homofóbico, sobre todo el culto y el informado, no se muestre tan abiertamente con su supuesto “odio y rechazo” por la homosexualidad y las prácticas homosexuales, las cuales quizá muchas veces quisiera practicar o practica en sumo y discretísimo secreto… Son siempre interesantes los comentarios de la gente…

Hay un miembro identificado como luis1210 en www.panfletonegro.com que dice algo que me llamó mucho la atención: «soy de los que piensa que mientras en los desfiles sigan yendo tipos con pantalones de cuero con el culo al aire difícilmente podrán reivindicar sus derechos o ser tomados en serio.» Y me llevó a pensar que quizá lo serio está ligado a lo heterosexual, a lo rígido, a lo social y convencionalmente aceptado como correcto y dentro de una moral impoluta e inmaculadamente mantenida. Por lo que, quien muestre rasgos de mostrar su verdad fuera de ese orden pre establecido de normas, no es serio, o no puede ser tomado como tal, lo que me hace pensar aún más, en el concepto y la concepción de lo serio y de la seriedad de las cosas y de las personas, es decir, que un tipo homosexual vaya a una marcha gay con pantalones de cuero y muestre el culo, es un acto que quizá lo podría anular de inmediato, por completo y para siempre de un comportamiento «serio», pero quien se muestra públicamente heterosexual, intachable y autocensurado, es visto y tomado como un tipo muy serio, sin saber y sin importar muchas veces que hará con su vida y con su culo en privado, que quizá es su mayor y verdadera verdad, pero la mantiene en secreto.

Por eso, creo que a veces, tenemos conceptos tan pre concebidos y estereotipamos de una manera tan fácil y tan ligera, que no deja de sorprender, sin mencionar que, primero deberíamos ver nuestros propios culos y aceptar y estar conscientes de lo que hacemos con ellos o de lo que nos gustaría hacer y no nos atrevemos, antes de posar la mirada juzgadora y censurante en el otro, en el que si se atrevió a hacer lo que nosotros no, a mostrarlo y a decirlo.

Quizá, pienso entonces, están los que se atreven y los que no se atreven, y encuentro que dentro de los que no se atreven es que están siempre los que juzgan, los que señalan y los que censuran a los demás, y basta muchas veces, con solo poner la mirada en la homosexualidad del otro para anularlo y desprestigiarlo, sin importar más nada.

Y es allí, donde siento y creo que deberían estar los derechos de todo tipo que deben serles reconocidos a los homosexuales, es decir, una marcha no debe ser para decir que se es “orgulloso” de ser gay, sino para decir que se es gay y que eso no te anula como persona, como ser humano, como portador de ideas que pueden aportar mucho a los demás y a este planeta, y es de eso de lo que deben estar orgullosos, de que a pesar de todo el estigma que siempre se le ha achacado a los homosexuales, han logrado vivir y avanzar en mostrar su realidad y mostrarse en un mundo hostil hacia ellos y demostrar que no son solo “homosexuales” sino que son otra cantidad de cosas y que pueden aportar tanto y más que los heterosexuales reales. Y es allí donde quizá sería interesante, ver cuáles han sido los aportes a la humanidad de homosexuales y heterosexuales, tomando esa condición como el punto más importante a destacar para ser capaces de aportar, y sabiendo que muchos de los que se identificaron como heterosexuales pudieron no serlo, pero asumiendo que así fue, es decir, el tema de la homosexualidad y la heterosexualidad debe pasar a ser un tema más fructífero y debe mirar otros aspectos y que no sea un tema que sirve más que para otra cosa que para hablar del homosexual de manera despectiva y designarlo como un ente despreciable para seguirlo socavando y humillando, probablemente pasa que hay mucho temor en reconocer los potenciales que tienen y es allí la reivindicación que deben buscar los homosexuales, y que el hecho de que sean atraídos sexual y sentimentalmente por alguien de sus mismo género deje de ser el hecho inminentemente preponderante para anularlos en todos los demás aspectos de la vida, del actuar y del pensar como seres vivos y seres humanos.

Aunque cierto si me parece, que quien sale con pantalones de cuero y muestra su culo a todos sin pudor, debería hacerlo con la certeza de lo que está haciendo, con una intención clara y buena, con el convencimiento de que no está haciendo algo que dañe a alguien más y con razones y argumentos que sienta que son suficientes y poderosos para defender lo que es y lo que está haciendo.

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