¡Oh! y desconfías de ti, conspirador.
Pero andas callado, suenas tan flojo,
desmemorias al silencio, si,
ruido eres, ruido inapreciable.
···················································
La soledad que derrumba este día sobre mi, es absoluta. Sin embargo tengo la certeza de haberme sometido como nunca a un éxtasis prolongado en las horas que...
Si de mi esperas...
un me importas, un te quiero
y un te amaré la vida entera,
en verdad que lo lamento
porque de mi boca no los escucharás
ni por un momento...
Casi todos sufrimos algún desorden de la personalidad, que puede ser catalogado como locura, pero como en otros aspectos de nuestras vidas parece que actuamos de manera normal, no nos internan en un manicomio, ni nos dan antipsicóticos.
Pero sobre todo no somos considerados “dementes”...
Utilizamos cookies para asegurar que damos la mejor experiencia al usuario en nuestro sitio web. Si continúa utilizando este sitio asumiremos que está de acuerdo.Estoy de acuerdo