Desde «Llamada Fatal» hasta «Buried»,la amenaza telefónica resulta siendo uno de los típicos clichés del cine de suspenso y afines.A propósito,en algunos países dicha práctica de acoso es penada por la ley.Hoy nuestro presidente la ejecutó en vivo y directo,cual «Big Brother» con complejo de secuestrador y terrorista.
Cualquier parecido con el villano de «Phone Booth» no es mera coincidencia.Sálvense quien pueda.
En suma,vamos de regreso al «Planeta de los Simios».
Otra vulgar distopía de ciencia ficción patrocinada por los mismos creadores de Aló Presidente.
Vaya calamidad republicana y democrática.
Es el abuso de poder del populismo mediático.Demagogia pura y dura.
¿Por qué no llama también a los responsables de PUDREVAL y los pone en su sitio?
No puedo con su hipocresía.
Además,como es su costumbre,juzga en cadena sin derecho a la legítima defensa.Asistimos entonces a un linchamiento moral por televisión,donde todos somos espectadores.
Es una siniestra cacería de brujas.
Inquisición oscurantista de la peor especie.