Palomas al vuelo

4
1047
Cuando tienes 6, la primera vez que alguien te dice «marico» sientes un enorme peso histórico tratando de aplastarte. O al menos eso recuerdo haber sentido yo, cuando mi hermano una vez me lo gritó, y cuando aún no sabía yo, qué significado tenía esa palabra. Sobre todas las cosas, sabía pensaba que era algo malo. Entonces sientes la inmensa necesidad de correr por un laberinto imaginario, y perderte, y no saber jamás de esa palabra, y lo que puede hacer contigo. La verdad es que terminas llorando. Pero entonces inicias la escuela, y el monstruo del cual escapabas se te aparece cara a cara. Y lo peor de todo, es que aparece multiplicado: gay, raro, pato, pájaro, mariposa, pargo, parchita, joto, marica, puto y más.
Muchas veces eres lo que atacas sin razón, porque el desprecio ataca y se despierta, cuando se ve reflejado, a sí mismo, en alguien más.
Siendo un niño, aprendes a defenderte como un niño. Porque si las palabras se hacen monstruos, aprendemos a comportarnos entonces como superhéroes, con identidades secretas, y un superpoder. Claro que cuando se caen nuestras gafas y se dan cuenta que nos parecemos más a Superman que a Clark Kent, empiezan los problemas.
El asunto es cuando luego de ciertos moretones físicos y psicológicos, descubres que hay demasiadas formas de ser homosexual, en referencia a lo que realmente significa ser homosexual. Siendo así, para ellos: Ser callado, era ser homosexual, no tener intereses sociales, era ser homosexual, dibujar, era homosexual, leer, era ser homosexual. Incluso gustarle a una niña, te hacía más homosexual que nada en el mundo. Aunque nada de esto tenga, o tuviese que ver jamás con sexualidad. Además, que la guerra que enfrentamos, es y ha sido, todos contra uno. Dios, los padres, los amigos: la gente. Del otro lado del ring, estabas tú, o estaba yo.
El problema es, cuando el positivismo o la creatividad, no te alcanzan para jugar, a ser un superhéroe, y te das cuenta, que bien, podrías ser el enemigo de una historia. O peor aún, la victima de la misma. Cuando notas que tu «poder», no sirve precisamente para defenderte. En esos días tienes 12 años,  rayan las paredes de tu edificio con tu nombre y aquella palabra de peso histórico, y  lanzan piedras que rompen tus vidrios y hacen llamadas a tu casa, e inventan cosas sobre ti. Posteriormente. Te das cuenta, que quieras, o no. Hay una guerra. Y quieras o no, tendrás que pelearla.
Pero lo preocupante de nuestras guerras, no es la existencia de las mismas, sino, la indiferencia que nos derrote antes de pelearlas. Porque en estos lados del mundo, no se ha medido el daño de la burla, ni los males que pueden hacerle a nuestros días. De tal modo, los días de adolescencia se asomaban. Y cualquier rasgo positivo, era buscado y ridiculizado por una comunidad heterosexista. Y ahí estuvo el peligro, de quien impone la discriminación. Sembrar en ti, una culpa que no te pertenece. Lástima que siendo un niño, ninguna profesora citara a Eleaonor Roosevelt y eso de «nadie puede hacerte sentir inferior sin tu consentimiento«. Para ese entonces, ya varias batallas habían sido perdidas.
Sin embargo en Biología, conocías a Darwin y su selección natural, cuyas leyes -cual biblia- nos diesen la espalda. Porque si el Darwinismo tuviese entera razón, los homosexuales, como población con características no destinadas a la reproducción, estaríamos destinados a desaparecer. De hecho, hoy yo no escribiría esto. Pero Darwin  tuvo razón, cuando hablaba de la adaptación, como el núcleo de la evolución. Y ahí es cuando entramos nosotros. Porque el individuo homosexual sabe de adaptaciones. Y ahí está la fortaleza, ahí está la evolución, aunque el resto de mis compañeros de clases, o vecinos no lo entendiesen. Ni hoy, ni nunca.
Entonces a finales de los 12, vas a casa de tu mejor amiga, y escuchas a su hermana mayor, hablando mal de ti, usando los términos ya antes repasados, y decides vengarte. Decides pasar por su cuarto y robarte un CD. Finalmente llegas a tu casa, pones el disco y escuchas algo que te educó, más que 8 años yendo a la escuela.
Decía entonces:
«No estoy yo por la labor de tirarles la primera piedra
si equivoco la ocasión y las hallo labio a labio en el salón
ni siquiera me atrevería a toser
si no gusto ya sé lo que hay que hacer
que con mis piedras hacen ellas su pared»
Era eso,  era alguien cantando sobre esa guerra a gritos que nadie nombraba con propiedad, y decían claramente que nadie podría ponerle fin. Entonces fue el inicio de la compresión. Fue así que empezaba a entender la carga histórica. Porque existió un Federico García Lorca contra el franquismo, y existió un Oscar Wilde contra una sociedad inglesa, una Virginia Woolf con piedras en los bolsillos, y un Reinaldo Arenas contra Fidel.
Con una canción de Mecano, un grupo que cantaba de esta forma, aún, cuando yo no había nacido. Entendí en esos días, que el conocimiento sería la voz que rompería el silencio, que el conocimiento sería la luz, ante el gris mortecino.  Que hay cosas que no podemos cambiar, y a esas cosas podemos odiarlas o aprender a quererlas. Y siempre es mejor ser funcional.
“Una de las últimas teorías propuestas para la homosexualidad se basa en la llamada  selección social. Propuesta por la profesora de biología de la Universidad de Stanford Joan Roughgarden,  la teoría se enfrenta a la selección sexual de Darwin. Básicamente niega la reducción de la diversidad sexual a dos sexos, uno masculino y agresivo y otro femenino y cohibido. Con numerosos ejemplos del reino animal y de culturasdistintas de la occidental, muestra que la naturaleza y las diferentes sociedades ofrecen soluciones sorprendentes a la sexualidad: peces con varios tipos diferentes de machos o cuyos componentes cambian de sexo en caso de necesidad; mamíferos que tienen a la vez órganos reproductores masculinos y femeninos, etc. En el caso de la biología humana, afirma que la existencia de homosexuales, transexuales y hermafroditas no es más que una variación natural que se integra perfectamente en la diversidad mostrada por los demás animales.”

Se trata de este modo, de la base de la defensa, porque cuando haces de tu punto débil un punto de fuerte, los golpes duelen menos. Entonces, hay cosas que ocurren dentro de ti, que explotan, cambian y te hacen sentir expansivo, pero lamentablemente, es difícil transmitirle la entera sensación a alguien más. Y ves entonces a personas que son gays, por ser gays, porque «Sólo eso son». No hay responsabilidad propia o respeto. Porque la tolerancia está en boca de muchos pero en filosofía de pocos. Y conoces mujeres machistas, gays homofobicos-heterofobicos-transfobicos.
Y todo entonces se parece a aquellos días de paredes rayadas y vidrios rotos. Aún, habrá personas dispuestas a aprender. Finalmente esas terminan siendo las mejores personas que puedas conocer. Para aquel momento cuando tienes 22 y alguien te dice «marico», dudo que la persona sepa, que «marico», proviene de «marica», y que en España le decían así a las «Marías», que a su vez a los hombres con nombres de Marías, le decían «maricos» y que finalmente, sólo repiten un lado desfigurado de la historia, sin saber, cómo o porqué.
En cuanto a aquella pregunta de aquella canción, que nadie hasta ahora ha respondido: ¿Quién detiene palomas al vuelo?
– Pues, nadie, nadie puede.

4 Comentarios

  1. Ok me gusto mucho debido a que tambien fui discriminado. Solo que yo los manipulaba para que pelearan entre ellos en vez de pegarme a mi,=) pero es muy duro pasar por eso, creo que no existe nada mas cruel que los niños. y me incluyo, ya que los manipulaba sin compasión.
    en lo que difiero es es en la interpretacion de la evolucion. desde Darwin mucha agua a corrido y se han mejorado notablemente sus teorias. En reptiles y peces algunas especies pueden cambiar de sexo por las presiones del medio, pero es diferente en mamiferos. son cosas muy diferentes .
    y no se pueden equiparar
    es como comparar un carro con un avion. Ambos tienen motores de combustion interna, ambos funcionan con gasolina, pero no podemos ponerlos juntos y hacer interpretaciones sobre ambos.
    esto que dices sobre los peces en especifico del pez payaso no se puede equiparar con los mamiferos.
    ninguno de la clase mamifera puede hacer lo mismo.
    La teoria de la selección sexual de darwin si tiene cupo para los homosexuales o miembros del clan que no se reproduzcan y si tiene una ventaja evolutiva. Puedes buscar por google a Amotz Zahavi es uno de los que ha tocado ese tema y ha escrito bastante sobre ello en especial en aves.
    Que como dije antes no necesariamente sus resultados son extrapolares a los mamiferos. Pero muchas de ellas se ha comprobado en mamiferos, ya que son comportamientos exitoso para las especies sociales. Con respecto a Roughgarden, lei sobre su teoria y tambien lei que sus teorias no pasaron la prueba de los modelos matematicos, que es la manera standart de probar las terias sobre la evolucion.
    a ella se le puede decir que «afirmaciones increíbles, necesitan pruebas increíbles» (estoy parafraseando pero se entiende)
    Y si va contra una teoria muy bien establecida y comprobada hasta la saciedad nesecita mas que pruebas endebles.
    Su teoria hasta donde tengo conocimiento, se hundió en algún lugar del mar de los sargazos.
    ya mezcalba cosas inconexas. te voy a poner un ejemplo; los hermafroditas. esta tiene varias causas, muchas de ellas embrionarias, que no voy a discutir aqui, en mi blog «otra version»hable sobre ello y de como era tratado por los medicos hasta los años 90.
    por lo regular hay uno de ellos por caa 250 habitantes, esto es que tienes tantas probabilidades de conseguirte con uno de ellos como con un pelirojo. en muchos casos ni ellos mismos saben que lo son, ya que los que desarrollan el pene y la vagina completa son mas bien casos raros, no es la mayoria y como son tan raros no integran nada, son rarezas.
    en algunas especies de mamiferos tienen mas o menos proporcion que los humanos, en algunos es casi desconocida y en otros se da mucho mas que nuestra especie. te repito no tiene nada que ver con la genetica si no con el desarrollo embrionario. Y el medio ambiente puede aumentar o disminuir su proporcion.
    la proporcion de homosexuales en nuestra especie es similar a otros mamiferos sociales, en algunos post anteriores he dicho algunas de las hipótesis que se manejan sobre ello, y de hecho si tienen una funcion en las especies sociales.
    ahora bien la proporcion de homosexualismo aumenta o disminuye con la presión demografica de la poblacion. nadie sabe la razon de ello.
    Pero lo anterior si ha sido ampliamente observado en mamiferos sociales.
    Por eso cuando lei las teoria de ese tipo me parecieron descabelladas y las deseche. lo ultimo que supe es que los modelos no funcionaron

  2. Chicos gracias por las opiniones y aportes. Espero retomar el ritmo de publicaciones acá, igual lo compartido en este buen sitio, puede ser visto en mi blog. Gracias de nuevo.

Dejar respuesta

Please enter your comment!
Please enter your name here