Una tarde de sábado

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Pensando y pensando en una tarde de sábado en mi cuarto o mi santuario. Con la ropa limpia regada en la cama, porque debo recogerla, pero no tengo ganas de moverme. Deseo ser vegetal por varias horas. Aunque pensándolo mejor, llevo días de vegetal. Miro mi librero, paso lista, deseo un libro que no está. Supongo que está en mi apartamento, tendré que esperar al lunes. Ese libro es Terrazo de Abelardo Díaz Alfaro. Ese libro lo he leído tantas y tantas veces, pero cada vez que lo leo es una experiencia nueva. La ropa sigue en la cama, se que debo recogerla, el lunes me tengo que regresar a mi apartamento. Por ahora no la pienso mover de la cama, mi cama a es grande, así que hay espacio para mi. En la televisión transmiten una novela, no presto atención, ni cambio de canal.

 

La televisión es mi acompañante, el silencio me desespera. Vuelvo a mirar los libros y encontré a Felices días Tío Sergio de Magaly García Ramis. Me provoca leerlo, pero aún lo tengo muy fresco en mi memoria. Ese tipo de libro me gusta, porque se donde se desarrolla y me parece que estoy en esos lugares. Vuelvo y miro la ropa y siento la desesperación de recoger, pero no, aún no quiero. La maleta sigue en el piso abierta, parece que me habla, pero la ignoro. Miro la televisión y están pasando anuncios publicitarios, me gusta verlos, algunos me dan risa o me dejan pensando.

 

Miro el techo, recuerdo cuando en mi antigua casa pegue galaxias, estrellas y planetas en todas las paredes. En el techo no pude porque no alcanzaba. Recuerdo en que en una esquina de aquel techo tenía un cohete y de su cola colgaban estrellas. Yo quería ser astronauta, tal era mi interés que compraba una revista de astronomía que traía mapas de constelaciones. Lo había tomado muy enserio, quería llegar al espacio. Pasaron los años y fui olvidando la idea de las estrellas, los plantas, las galaxias y el espacio.

 

La ropa me esta estorbando, ya siento que no me puedo mover libremente. Pero no, no la voy a recoger todavía, no quiero, ahora no. Vuelvo a mirar el librero, veo un libro que me querían robar, Microfísica del Poder de Michel Foucault. Aquel panita skin head, muy panita.  Era grandulón, parecía una persona muy seria.  Cuando no lo conocía, me intimidaba.  Cuando sonreía me acordaba a tío Cosa, el de Adams Family (en la que sale el puertorriqueño Raúl Julía). Pero se convirtió en un gran panita. Compartíamos intereses y libros sociológicos , como lo eran los libros de Michel Foucault. Un día me amenazo con robarme el libro y como era todo un anarquista, le importaba un pepino angolo si yo gritará o llorará por el libro. Por eso lo escondí en un lugar de mi apartamento y tan pronto fui a mi casa lo lleve y jamás y nunca volvió a mi apartamento. Ahora me pregunto cual sería su nombre y que habrá pasado con su vida, nunca más lo volví a ver.

 

Los anuncios publicitarios de medicamentos me parecen idiotas. ¿Para que promocionar un medicamento si te digo rápidamente que pueden causar X o Y cosa? A mi casa acaba de llegar visita, pero no me quiero levantar de mi cama. Solo quiero hacer nada. Siento hambre, pero puedo aguantar un poco más. Cuando me arda el estómago me levantaré a comer algo. La ropa sigue en mi cama, yo se que debo recogerla, pero no quiero. Me niego a hacer eso ahora.

 

Miro mi escritorio y hay más libros, dvd’s y cd’s. Entre los libros, me encuentro a Don Quijote, lo estoy releyendo, y cada vez compruebo que cuando releo un libro encuentro cosas distintas. Claro, la primera vez que lo leí estaba comenzando la high school. La segunda vez fue en mi primer año de universidad. La tercera en mi último año de universidad. Ahora lo leo porque en agosto comienzo un curso de maestría de Don Quijote. La madurez de la persona tiene mucho que ver con la interpretación que le das a estás grandes obras. En mi escritorio hay una colección de agendas viejas, veo la del 2006, 2007, 2008, 2009, 2010 y la actual, 2011. Veo un libro de Historia de Puerto Rico, veo dos diccionarios, uno de las religiones del mundo y el otro de sociología. Están las novelas La Celestina y El Lazarillo de Tormes y mi libro de lenguaje de señas. Entre los dvd’s están dos conciertos de Incubus Alive Red Rocks y Look Alive. También hay un season de The Flintstones, mi graduación de la universidad en el 2008. Hay tres películas de simios, Iceman, Quest for fire y Gorrilla in the Mist, las tuve que ver para una clase de antropología. Los cd’s que estan son de Shakira, La Ley, Fiel a la Vega, Circo, Gilberto Gil y Robi Draco Rosa.

 

La ropa, la ropa no habla, pero mi madre sí. Me moveré a recoger la ropa. Ya casi es lunes y me debo ir.

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